El desarrollo de la industria azucarera continúa entre las prioridades del país Autor: Hugo García Publicado: 21/06/2021 | 09:19 pm
La industria azucarera cubana transita por un período de reanimación paulatina, a partir de una proyección estatal que prevé el aumento de la producción de caña de forma gradual y un crecimiento anual en la fabricación de crudo de alrededor de 10 % a 15 % cada año hasta 2016, aunque sin descartar crecimientos superiores.
Especialistas del sector concuerdan con este progreso a pesar de los resultados de la zafra última cuando -según las estadísticas- los planes de producción se cumplieron a 95 % creciendo a un ritmo de 12 % con respecto a años anteriores; la exportación alcanzó 99 % y los derivados exportables de la caña, 112 %.
Expertos del Grupo Empresarial AZCUBA valoran estas cifras como satisfactorias, aunque el déficit de molienda a causa de la arrancada tardía de numerosos centrales y la ineficiencia en los campos originaron la pérdida de alrededor de 20 000 toneladas de azúcar.
A partir de las fallas agroindustriales señaladas, Noel Casañas, vicepresidente del grupo AZCUBA, destacó que la presente campaña perteneciente al período 2013-2014 "está enfocada en eliminar la pérdida de tiempo en la industria; efectuar las reparaciones de la maquinaria al ritmo y costo previsto y destinar los recursos materiales o humanos a los puntos críticos que contribuyeron a los incumplimientos anteriores.
Aseveró el Directivo que la situación más tensa del sector radica en el transporte automotor, en el cual existen demoras con la entrada al país de las piezas de repuesto, si bien "se trabaja con intensidad en los talleres para garantizar la puesta en funcionamiento de los equipos".
Hay preocupación por el mal estado de algunos caminos cañeros, Talón de Aquiles para el traslado en tiempo y forma de la materia prima hacia los centrales. Para ello -puntualizó el Ejecutivo- "se han destinado brigadas especializadas manuales y mecánicas en coordinación con el Ministerio de Transporte u otros organismos y con los medios disponibles en todos los centrales para desarrollar en los campos el cronograma de corte anunciado y de esa forma eliminar los atrasos en la entrega de la gramínea".
Por otro lado están garantizados los recursos humanos en la presente molienda, vértice también de la eficiencia industrial. El incremento de la productividad esperada debe, en alguna medida, constituir resultado directo del completamiento de la fuerza laboral en todas las áreas, desde los campos hasta los procesos fabriles, de distribución y comercialización. Desde la zafra anterior se ha logrado revisar e incrementar los sistemas de pago por resultados a los trabajadores, en concordancia con los niveles de rendimiento y producción, aseguró Casañas.
Asimismo, manifestó que con el propósito de elevar la eficiencia del corte mecanizado y disminuir en alguna medida el manual como símbolo de aprovechamiento de los cultivos, "AZCUBA dispone de 38 nuevas combinadas, lo cual significa 43 % de corte de la caña con nuevas tecnologías de alta productividad; a ello se le suma la remotorización de 82 camiones Kamaz con motores de alta potencia permitiendo así, con el doble remolque, el incremento de las capacidades de tiro y reducir el consumo de combustible". Junto a estos vehículos "entrarán también en acción 212 remolques que el año pasado no hicieron zafra y 90 más de la industria nacional con capacidad para 20 toneladas, se han construido 60 autobasculantes para proteger los equipos de carga y los suelos y se desarrolla un nuevo prototipo de combinada cañera que figura como la solución definitiva del problema de corte de caña", expresó.
Además de los centrales que ya iniciaron molienda, este mes arrancarán 32 centrales y el resto lo hará antes del 12 de enero para completar una cifra de 49 que concluirán el proceso en abril. Los especialistas han proyectado para la presente campaña un aprovechamiento de la capacidad de molida de 72 %, un rendimiento en azúcar superior en 6 % a la pasada contienda y un crecimiento de 18 % de azúcar a partir de la caña en existencia, para acercarse a la producción total de 1 800 000 toneladas.
Retos y perspectivas
Las perspectivas de la industria cubana del azúcar crecen y se multiplican, con proyecciones y planes que abarcan la siembra de la caña, el corte, la producción, hasta la comercialización de sus derivados como parte de una cadena ininterrumpida donde debe primar la eficiencia industrial para alcanzar óptimos resultados.
De esta manera el Grupo Empresarial AZCUBA espera realizar una adecuada aplicación de la ciencia y la técnica para elevar la producción del crudo en la presente campaña, la cual prevén será la mayor de los últimos 10 años.
Sin embargo, el fantasma de la ausencia de caña amenaza la economía de los recursos como factor clave en los procesos fabriles. Precisamente a crecer en áreas cañeras es el llamado de la dirección del país, como la principal dificultad que históricamente ha afrontado la zafra en Cuba, pues la mayoría de las entidades tienen cuotas muy por debajo de las capacidades industriales instaladas, la causa fundamental de la brevedad de la zafra y de los continuos incumplimientos en los planes productivos.
Juan Carlos Pérez Hernández, director de atención a productores de AZCUBA, manifiestó que el proceso de producción de caña está enmarcado en un programa de desarrollo a corto plazo, hasta 2016, y a largo plazo, hasta 2020. Este esquema, que partió de una producción muy deprimida cuando hace décadas molían solo 39 ingenios y cuando el monto total de producción no superaba las 11 000 000 de toneladas de caña, tiene el propósito absoluto de acercar la caña a los centrales.
Según las cifras emitidas, el pasado año lograron acercarse 35 000 hectáreas y para el presente fueron 36 000 más, para concluir el bienio con 71 000 hectáreas incorporadas en total, las cuales permanecían deficientemente explotadas o se encontraban ociosas. Para cumplir con el plan antes de la zafra de 2016 se prevé la aproximación de las últimas 100 000 hectáreas.
Asimismo, se ha logrado consolidar un paquete tecnológico destinado en exclusivo a las áreas cañeras, fundamentalmente a la atención de los retoños, según precisaron técnicos del sector; otros factores que han influido en la ampliación de la producción cañera es el aumento del precio de la caña a los productores, hasta 104 pesos por toneladas, la entrega de tierras para este cultivo y la eliminación de medidas estatales que contrarrestaban el incremento productivo de la gramínea. En total en el país cultivan caña 520 Uniones Básicas de producción Cooperativa (UBPC), 250 Cooperativas de producción Agropecuaria (CPA) y alrededor de 70 Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS), que en general agrupan toda la tierra donde están ubicadas el total de la que se distribuye en la geografía cubana.
Para garantizar al máximo el rendimiento de los cultivos fue necesario desplegar 36 máquinas eléctricas de riego; de estas, 19 de producción nacional, distribuidas por toda la Isla, abarcando cada una 78 hectáreas de riego. Con este regadío mecanizado la producción estimada puede rebasar las 120 toneladas de caña por cada hectárea que, conjuntamente con el desarrollo de programas de semillas, constituyen el incentivo para elevar el beneficio agrícola de los suelos.
En los últimos tres años las instituciones de AZCUBA han incumplido los planes de siembra, por lo tanto no se ha obtenido la producción estimada. La falta de previsión en estos programas, la preparación de las tierras cultivables en tiempo y forma y el manejo adecuado de las áreas de riego para lograr el aprovechamiento máximo constituyen los principales retos de la industria azucarera cubana para los próximos años.
Diversificar la fabricación para aportar derivados
La agroindustria azucarera cubana en el escenario actual y futuro puede contribuir a grandes problemas presentes en la humanidad es por ello que urge lograr una industria flexible y diversificada que además de potenciar la producción de alimentos, promueva fuentes de empleo dignas y genere energía excedente para crear un entorno social incluyente.
Cuba posee vasta tradición en la producción cañera, que data desde el descubrimiento de la Isla por los conquistadores españoles hace medio milenio, y aunque en el devenir de los siglos hasta la actualidad ha sufrido altas y bajas en su proceso productivo y comercial, ahora apuesta por una industria diversificada que además de garantizar los índices de consumo y exportación logre integrar sistemas viables para la economía y la sociedad.
Ángel Miguel Méndez Torres, director de atención a plantas industriales del Grupo AZCUBA, destacó que en la producción de derivados se labora en dos líneas fundamentales: el incremento de la producción de alimento animal a partir de la caña, para lo cual están adecuadas numerosas plantas de pienso en varios centrales con instalaciones paralizadas y la segunda línea es la reactivación, el desarrollo y la modernización de todas las destilerías para incrementar la calidad del alcohol, producto de gran impacto económico debido a las ventajas de su exportación y con alta demanda en el mercado internacional, aunque también se intensifica la fabricación del resto de los derivados como caramelos, rones, sorbitol, fitomás y otras líneas donde existe un potencial superior.
Están creadas las condiciones para el almacenamiento de la producción que se espera. Para ello fue necesario realizar un proceso de impermeabilización total de los almacenes lo cual favorece la estadía de los productos por largos periodos, sin que pueda existir pérdida ni deterioro de la calidad.
En la pasada zafra los trabajadores azucareros tuvieron un ahorro energético significativo y acorde con las circunstancias que demanda el país, alcanzando una generación eléctrica de 37 Kw/h por tonelada de caña. Los centrales lograron autoabastecerse a 109 % y aportaron al sistema electroenergético nacional alrededor de 110 GW/hora, situación esta que espera incrementarse en la presente etapa.
Para esta campaña 2013-2014 Cuba aspira a llegar a 1,8 millones de toneladas de azúcar y superar así en 18 % la última zafra, en la que se incumplieron en 11 % los planes de producción con 192 000 toneladas menos del total planificado, según datos recientes de AZCUBA.
(Fuente: Mesa Redonda sobre el tema)