Autor: Miguel Rubiera Justiz Publicado: 21/06/2021 | 09:33 pm
Con el comienzo de labores arqueológicas en las ruinas de la hacienda Santa Paulina amplían sus horizontes Los Caminos del Café, proyecto internacional en pos del realce de ese patrimonio del Oriente cubano.
Aunque esas faenas tendrán apogeo durante 2017, los especialistas adelantan que el enclave es una favorable muestra de adaptación al accidentado relieve topográfico del lugar, que fue aprovechado en función del abasto de agua por gravedad y con el empleo de terrazas.
De tal forma, cuando avancen esos trabajos se darán nuevos pasos en el circuito dos, cuyo epicentro es la casona del cafetal Fraternidad, en pleno proceso de restauración que le devolverá el esplendor y la convertirá en punto de atracción turística y cultural para lugareños y visitantes.
Ubicado en los consejos populares de Ramón de Las Yaguas y El Escandel, el proyecto tiene como accidente geográfico principal la Meseta de Santa María del Loreto, de extraordinarios valores naturales e insertado en el paisaje arqueológico de los antiguos cafetales franceses del sur-oriente cubano, Patrimonio Mundial.
Localizados entre las provincias de Santiago de Cuba y Guantánamo, son 171 los antiguos emporios agrícolas incluidos en esa condición del Patrimonio de la Humanidad, y la Oficina del Conservador de la Ciudad (OCC) aplica un plan de manejo integrado y de gestión de ese paisaje que está organizado en los circuitos uno y dos.
El primero, correspondiente a la Gran Piedra, abarca los cafetales La Idalia, La Isabelica, La Gran Sofía, Las Mercedes y La Siberia, mientras que el segundo, con Fraternidad como eje, incluye el de ese nombre y los de San Felipe, San Juan de Escocia, San Luis de Jacas y Santa Paulina.
Con el auspicio de la OCC, la Fundación franco-belga Malongo y la Unión Europea, este programa de rescate patrimonial añadirá valores a parajes de por sí exuberantes y hermosos del sureste de la geografía cubana. (PL)