Autor: Internet Publicado: 21/06/2021 | 09:31 pm
Qué decir en Twitter es una interrogante que para ciertos usuarios de esta red social puede resultar algo difícil, ya que todo depende de los objetivos trazados y cada tweet debe tener 140 caracteres como máximo.
Si se desea una retroalimentación inmediata, es recomendable escribir algunas preguntas. Esto estimula la conversación y también puede ayudar a adoptar algunas decisiones, de acuerdo con la documentación ofrecida en el curso online En Redes Sociales impartido por CEDECO, academia española de informática.
Subir contenido acerca de eventos, reenviar buenos tuits de otras personas, agregar otros que son links a páginas interesantes, subir post de blogs y enviar pensamientos aleatorios, son algunas de las aplicaciones recomendadas por la fuente.
Perfiles
Entre las diferentes clasificaciones de perfiles existentes en Twitter, el Klout que "pretende convertirse en el estándar para la medición de la influencia de marca en redes sociales".
Explica CEDECO que este podría definirse como una fórmula para obtener el grado de influencia social del usuario, basado en su actividad, en la repercusión de sus mensajes y en la propia influencia de sus seguidores y amigos. Agrega que según el valor de su algoritmo, la influencia del perfil se puede clasificar en diversas categorías.
El observador es aquel usuario que mediante su perfil prefiere ver lo que pasa en las redes, lo que comentan sus contactos y no se lanza a realizar comunicaciones. Mientras, el explorador busca nuevas maneras de interactuar con sus contactos y suele asimilarse con un crecimiento en su actividad.
Se le llama aficionado a quien está comenzando a usar la web social y tiene un bajo nivel de influencia. Este necesita compartir más información para enganchar a un mayor número de seguidores.
Al conversador le encanta estar conectado y mantener conversaciones, aunque en una red limitada de contactos. El activista, por su parte, "tiene ideas o causas que desea compartir con el mundo; es capaz de enganchar con una audiencia concreta que le tiene en alta estima por su labor comunicativa".
Aquella persona cuya generosidad es una característica clave y que se ha convertido en relevante para un tema concreto, altamente considerado por sus contactos, es conocida como sociable. "Tiene facilidad para conectar con nuevos perfiles por su sabiduría en redes sociales".
Con alta consideración en sus opiniones, contactos con mucha vinculación y sin llegar a ser una celebridad, el especialista es considerado un experto en su área de trabajo.
El conector de redes "sabe cómo conectar con la audiencia y lo hace de forma generosa, ayudando a sus contactos, con lo que se gana su fidelidad y un alto nivel de influencia".
El que sigue las tendencias, sabe qué es importante seguir y extrae lo relevante para comunicárselo a sus contactos, es el sindicador. En tanto, el alimentador tiene una audiencia que confía en el flujo de información que ofrece sobre su sector o servicios. Constituye una fuente habitual de consulta para sus seguidores.
Elegir a las personas más relevantes y seleccionar el mejor contenido para compartirlo a su amplia audiencia, es algo que sabe hacer muy bien el cuidador, considerado por sus seguidores una fuente de información esencial para el trabajo.
El locutor genera mucho contenido que se expande a una gran audiencia de forma casi inmediata y el líder de opinión cuenta con la confianza de sus seguidores en cuanto a sus opiniones acerca de su sector de actividad.
Saber lo que le gusta a su audiencia es una característica clave del degustador, el cual está constantemente pendiente de las tendencias. Sus opiniones son muy valoradas.
Una voz autorizada y ampliamente reconocida en un área determinada, es el experto; aunque el perfil con mayor influencia es el de la celebridad, cuyos contenidos son compartidos por multitud de contactos.
"Estas categorías se combinan en una matriz de influencia, organizada en torno a cuatro ejes: compartir/crear, amplio/focalizado, ocasional o consistente, escucha/participación", aclara tambièn la academia española de informática.
No obstante, atendiendo a quién pertenece el perfil, puede encontrarse una clasificación más amplia.
Influencia de la audiencia
Para medir el alcance o tamaño de la audiencia deben tenerse en cuenta diversos factores, tales como los seguidores, seguimientos mutuos, amigos, número de retuits, usuarios únicos que realizan comentarios y los que utilizan me gusta, ratio de seguidores/seguidos, porcentaje de seguidores tras seguirles, menciones y listas en las que se ha incluido al usuario en cuestión.
En cuanto a la difusión, entendida como la probabilidad de que los mensajes generen reacciones, se divide en varias categorías: compromiso de los seguidores, velocidad en la que se difunden los mensajes y nivel de actividad que generan los comunicados.
Se mide teniendo en cuenta los usuarios únicos que han retuiteado los comentarios, mensajes únicos retuiteados, número de me gusta por mensaje, comentarios por artículo (post), porcentaje de retuit por seguidor, menciones únicas de @usuario, porcentaje de menciones por seguidores y número de actualizaciones.
También es necesario valorar las inclusiones en listas, ratio seguidores/seguidos, porcentaje de seguidos con respecto a los seguidores, usuarios únicos que retuiteen los mensajes, usuarios únicos que comentan, relevancia de seguidores y de usuarios que retuitean y marcan los mensajes como me gusta.
Teniendo en cuenta que hoy día, a nivel mundial, muchos están en Twitter: empresas, celebridades, periodistas, profesionales y ciudadanos en general, ofrecemos la siguiente guía básica sobre cómo empezar, tomada de la fuente citada.
• Darse de alta en Twitter y crear un canal propio: Elegir un nombre de usuario apropiado e introducir un pequeño texto para explicar quién es el usuario y a qué se dedica.
• Personalizar el canal con el "toque" personal de cada usuario: Un diseño atractivo ayuda mucho y es fácil de conseguir.
• Buscar gente conocida y hacerse seguidor: Encontrando personas del mismo ámbito laboral se comienza a tejer una red propia.
• Integrar elementos y automatizar Twitter: Vincular otros espacios de internet que emitan RSS.
• Tuitear artículos, documentos y referencias, entre otros elementos de interés, antes de crear contenidos propios, además de retuitear mensajes e introducir contenidos de la web.
Fuente consultada:
Principales herramientas de los Social Media, curso online En Redes Sociales. Autor: CEDECO, Academia de informática de Madrid. 2012