Autor: Raúl Abreu Publicado: 21/06/2021 | 09:29 pm
Santiago de Cuba trasciende con fama original. Su voluntad de amanecer ha hecho girar las manecillas del reloj en sentido contrario como una odisea, pasado y horizonte a la vez en una ciudad que es historia, cultura, rebeldía y sueños para que luzca como nueva en su aniversario 500.
La ancianidad ha trascendido el tiempo desempolvando recuerdos, haciendo caminos. Y hoy lo bello y auténtico invitan a caminar sus calles de lomas, a visitar los museos, a arrollar en una conga o a conocer a su gente sencilla y hospitalaria, de la mano de Omar López Rodríguez, un santiaguero apasionado que disfruta con orgullo los encantos de esta provincia oriental, viva mezcla de razas, tradiciones y ritmos caribeños.
"Santiago ha escrito la historia a través del tiempo y para nosotros conservarla es un reto y un compromiso extraordinario, porque es la ciudad de la historia en Cuba".
Como historiador y director de la Oficina del Conservador de la Ciudad, rememora que desde su fundación, en el verano de 1515, Diego Velázquez la nombró villa principal y fue capital de la Isla durante la primera mitad del siglo XVI. "Desde Santiago se expidió el escudo de Cuba, fue sede del Obispado y de los gobernadores de entonces, y desde aquí salió Hernán Cortés, primer alcalde de la ciudad, para la conquista de México".
Luego, en el siglo XVII, siendo La Habana capital, esta bella urbe adquiere un papel más vinculado con el Caribe. España se protegía porque Inglaterra estaba en Jamaica, había otras potencias merodeando y para fortificarla se construye esa obra meramente extraordinaria que es el Castillo del Morro, San Pedro de la Roca, hoy Patrimonio de la Humanidad.
Omar López atribuye a los acontecimientos de finales del siglo XVIII (las revoluciones Francesa y de Santo Domingo, el nacimiento de la República de Haití) la llegada de emigrantes a Santiago, "tantos que ven en las montañas el lugar propicio para sembrar ese aromático grano y convertir la zona en un emporio del café mundial, huella relevante en la historia, pues se transformó con el tiempo, en lo que es hoy el Patrimonio Arqueológico Cafetalero, también Pa-trimonio de la Humanidad".
Resalta el protagonismo santiaguero en la Guerra de los 10 Años, en la Guerra Chiquita, en la de Martí, o la Guerra Necesaria y ahí hay nombres que no puede dejar de mencionar como el Lugarteniente General Antonio Maceo, paradigma de nuestras epopeyas independentistas, o Moncada, Flor Crombet y otros tantos y tantos generales que tuvo Santiago en ese acontecer, así como la Protesta de Baraguá, una de las páginas más gloriosas de nuestra historia al decir de Martí, y escenario del fin del dominio español en América.
Y afirma con vehemencia el Historiador que "el hundimiento en nuestras costas del Cristóbal Colón, último barco de la armada española de Cervera, significó el fin del imperio colonialista, pero también surge el nuevo imperialismo en aguas santiagueras, y eso tiene que ver con la historia universal y fue escrito en nuestras tierras".
De Cuba mediatizada resalta cuando Fidel, al frente de un grupo de jóvenes, asalta la segunda fortaleza militar del país, el cuartel Moncada. "Solo una ilusión, un pensamiento tan extraordinario como no dejar morir al Apóstol en el año de su centenario, fue capaz de movilizar a tanta juventud para una osadía como esa que sabemos que no fue un triunfo militar, pero sí levantó el espíritu de todos los cubanos hacia un hecho revolucionario que terminó como etapa el 1ro. de enero de 1959, también en Santiago, en su Plaza Mayor, cuando el líder histórico de la Revolución, desde el balcón central del Ayuntamiento, declaró el triunfo del Ejército Rebelde.
Eso hace que Santiago sea la ciudad de la historia, y por eso el propio Fidel, en 1983, decidió otorgarle la condición de Héroe de la República de Cuba, es la única en el país que ostenta tal condición.
Y López Rodríguez continúa su diálogo: "¿Qué puede significar eso para un simple restaurador como yo? Una enorme responsabilidad, un orgullo muy importante tocar con nuestras manos el lugar sagrado donde descansa José Martí, o donde nacieron Antonio Maceo, Heredia, el primer poeta romántico de América, ir al cementerio donde está la tumba de Compay Segundo, Miguel Matamoros, Ñico Saquito. Cuánto de cultura, de historia, ahí está el Padre de la Patria, Carlos Manuel de Céspedes, Mariana Grajales, el autor de nuestro himno nacional, Perucho Figueredo…
"Eso es lo que significa conservar la historia de Santiago. Somos muchos, un enorme equipo, solo la Oficina del Conservador tiene a 1 200 personas que se dedican día a día el trabajo de hacer nuestro patrimonio visible, de ponerlo para que el mundo entienda, lo conozca, claro que no lo hacemos solos, aquí hay un empuje, no hay entidad que no preste su grano de arena, que no apoye esa motivación importante para conservarla como la ciudad de la historia".
La psicología del santiaguero como heredero de tantas culturas
"Santiago es un lugar espectacular del Caribe, y el Caribe en general es dado a las migraciones. Está casi en el centro geométrico de ese mar y entonces teníamos nuestros aborígenes, llegan los españoles en 1515, pocos años después desembarcó el primer barco negrero, le siguen las emigraciones francesa y la china, o sea, la cultura santiaguera es, como la cubana, un enorme ajiaco, donde se suman lo mejor de cada una de esas y cuando se revuelven y se mezclan dan un sabor único, especial, y esa unión nos coloca en un estadio más alto.
"Si lo llevamos a lo cultural, yo digo que Santiago es también un emporio musical extraordinario, aquí nació la música cubana con la obra de Esteban Salas, en la capilla de nuestra catedral. También Pepe Sánchez escribe el primer bolero, y surge la trova con Sindo Garay, el son con Matamoros. ¿Qué se podría hablar de cultura si no tocamos y analizamos en detalles la santiaguera?
Y hasta el ron de esta tierra es de inmensa calidad, sin chovinismo de este auténtico santiaguero, y asegura: "No hay nada que ligue mejor que el son y el ron. Y en el plano universal contamos con la tumba francesa, la Caridad del Oriente, que es la primera joya de la cultura inmaterial cubana, aprobada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.
"¿Qué decir entonces de la conga oriental o de la carabalí olugo, la carabalí suama o el carnaval santiaguero, que es la fiesta por excelencia, extraordinariamente participativa y popular. Muchos cubanos esperan esa fecha para venir, no para mirar, sino para disfrutar, sentir lo que es el carnaval. Y no recuerdo haber visto una persona que se quede tranquila cuando pasa una conga, es parte del sentimiento interno del ser humano salir detrás arrollando. Todo cubano nace sabiendo arrollar".
Antes y después de su aniversario 500
Estos cinco siglos de la Ciudad Heroína marcan, sin dudas, una diferencia. Para su Conservador, una ciudad con tanta historia y patrimonio necesariamente ha vivido por estos días un momento de reflexión, de mirar atrás. "Muchas personas me dicen que estoy escribiendo los 500 años de la Pedagogía en Santiago, o del desarrollo de la salud o de la literatura y así están totalizando la historia, tan importante para identificarse los pueblos y tenerlo como herencia. Ese ha sido el momento del aniversario 500, una revisión de la historia para tener los pies firmes, y visualizar el futuro", afirma Omar López.
Hace dos años pasó por Santiago un ciclón terrible: el Sandy, que prácticamente arrasó con muchos sitios y calles. Los santiagueros rápidamente se recuperaron y fueron a la carga porque ni uno solo quería que la ciudad llegara a los 500 años en malas condiciones y el esfuerzo ha sido titánico. Muchos cubanos y amigos de otras partes han venido a apoyar el renacer de la ciudad, con un proyecto integrador aprobado por el Consejo de Ministros en el plan de ordenamiento urbano de Santiago. Vamos de la ciudad que tenemos a la que soñamos, porque después del aniversario la seguiremos construyendo y afianzando su cultura, su historia, y todos los elementos que la configuran, especialmente para que el santiaguero tenga una mejor calidad de vida y aquellos que nos visiten, vean a un Santiago renovado que tiene pasado, presente y que construye su futuro".
Hacer de esta también la capital de todos los cubanos
Un hombre erudito, apasionado de la historia y categórico en sus planteamientos, siente como cubano orgullo de la capital que tenemos: " La Habana es una ciudad maravilla del mundo, y deseo que siempre esté así, pero también que Santiago tenga una posición especial en el ámbito nacional, caribeño y americano. ¿Cómo lograrlo? Tenemos una ciudad con un rico patrimonio, que poco a poco se ha ido recuperando y queremos mostrarlo al mundo.
"En ese empeño hay tres elementos básicos: el conocimiento, se ha estudiado la ciudad por muchos especialistas, en ámbitos diversos y eso nos permite no equivocarnos en el camino de qué es lo más importante, lo esencial; qué es lo que nos identifica; dónde están los parámetros de identidad de los santiagueros, por eso Santiago hoy es una ciudad que sabe dónde están sus puntos principales. Tenemos, además, clara conciencia de nuestro territorio patrimonial. ¿Qué se puede hablar de una ciudad con un paisaje fortificado -existe un Castillo del Morro con la condición de Patrimonio de la Humanidad-; qué se puede hablar de una ciudad que tiene un centro histórico de 3,2 kilómetros cuadrados con un conjunto extraordinario de monumentos y con una vida cultural activa; qué podemos hablar de una ciudad en las montañas que la rodean radique un Monumento Arqueológico Cafetalero, declarado Patrimonio de la Humanidad; qué podemos hablar de una ciudad que tiene pegada a ella un pequeño pobladito minero del siglo XVI que es hoy el Santuario Nacional, donde está la Virgen de la Caridad del Cobre, que es además de las antiguas minas de América y uno de los puntos significados por la Unesco en la ruta del esclavo por América; qué podemos hablar de una ciudad que tiene un cementerio patrimonial el cual es un museo a cielo abierto - sin dudas uno de los sitios más visitados para rendir honor a tantos héroes y mártires que hay allí- ; y qué podemos decir de ese patrimonio tan novedoso y raro que es el patrimonio sumergido? Santiago tiene una flota española de Cervera completa hundida en su litoral, lo que deriva en una página de la historia universal.
"Cuando sumas te das cuenta de que tenemos un potencial extraordinario que el mundo debe conocer, en esa visibilidad hemos trabajado, en lo que llamamos la puesta en valor, ¿para qué?, para el desarrollo turístico, el nacional y el internacional, para que todo el que venga a Santiago tenga adonde ir y con las condiciones creadas de estancia y de movimiento. Porque tú llegas a Santiago y dices: me voy para El Cobre o para las Ruinas cafetaleras, o para el sitio Castillo del Morro. De hecho funciona como una base de operaciones hacia distintos puntos, todos cercanos y en media hora estás allí en cualquiera de esos y puedes dedicarle un día, o una estancia con extraordinario placer".
Y por último menciona ese clima muy especial. "Es un eterno verano. Mirar el Mar Caribe desde la Gran Piedra es un hecho extraordinario".
Un enorme potencial turístico
Más que un apasionado es un visor de futuro: "El Ministerio del Turismo ha hecho un esfuerzo extraordinario en la recuperación de obras como el hotel Imperial, una joya de nuestra arquitectura. Nace el paseo litoral en la Avenida del Puerto, con una cervecera al aire libre para que todos vean ese proceso del líquido que tanto nos gusta, además de un hermoso complejo de nueve parques y un malecón, convertido de hecho en un lugar apropiado para el arribo de cruceros.
"Nuestra bahía es preciosa, extraordinaria. Desde que llegas a Santiago te das cuenta de que es una ciudad paisaje, que se ubica entre el mar y las montañas. Los santiagueros somos marineros y montañeses: siempre se está subiendo o bajando. Yo digo que, en parte, el cuerpo de nuestras mujeres hermosas, llenas de curvas, se lo deben a esta situación singular. La arquitectura nuestra es muy especial, antisísmica, no ahora que ya existen estudios y experiencias de cómo poner los aceros para eso, sino desde que se construyeron las primeras casas en el siglo XVI se buscó la manera de que sobrevivieran.
"Nuestra catedral, que es la Santa Basílica Metropolitana, es de madera, sin embargo la miras y parece que no es así. Entras y al caminar por sus techos, ves que es un bosque y todo está soportada por mazos de horcones de madera que son los que le permiten moverse cuando la tierra tiembla, y parte también de esas singularidades que tiene nuestro urbanismo nos convierten en una ciudad mirador, algo que siempre llama la atención como paisaje caribeño y americano Eso es lo que encuentra en este rincón de la isla de Cuba".
Y del calor ni hablar
"En Santiago el calor es un símbolo por el clima y por su gente. No por gusto le llaman la tierra caliente. Es curioso como aquí se aprende a caminar buscando la sombra, huyendo del sol intenso que quema. Esquivamos esa sofocación, pero a la vez el calor del pueblo santiaguero es por naturaleza cordial, hospitalario, amistoso y esa cualidad humana es parte de la idiosincrasia de hombres y mujeres sencillos y notablemente orgullosos de haber nacido donde el sol calienta la tierra".